Chang O Lin sobre la operación retorno

El tiempo está loco, loco. Que ya lo decíamos nosotros que no era normal los mediodías tropicales que llevamos pasando en el centro peninsular como dicen chicos del tiempo, y claro lo hemos pagado. Digo hemos por solidaridad colectiva, porque nosotros estamos en el grupo de precavidos a los que el tiempo no les pilla a contrapié. Así que en el retiro de semana santa hemos hecho acopio de provisiones hipercalóricas, subida de calefacción como si el petróleo fuera eterno, y salidas al exterior solo en caso de peligro de muerte (que afortunadamente no han sido necesarias).

Total que así emprendimos el camino de vuelta, en las peores de las circunstancias posibles, con un viento del norte que desplazaba a los camiones con cargas peligrosas, nieve en la carretera y en las laderas, peligro de aludes, ventiscas de las que hacen inútiles los limpia parabrisas, hielo en la calzada, y bajo muchos grados de temperatura ambiente! Menos mal que llevábamos de todo: móviles. comida, agua, mantas, calefacción central, radio, palomitas, dvds, chocolate a la taza, chalecos reflectantes y la cope que era la emisora que menos se perdía. Así que llegamos divinamente y como sabemos elegir la hora con mucho tino sin retenciones que son unos exagerados los del telediario!