domingo, octubre 21

L´Arene et son roi









Convierto a El chico de la chaqueta azul en colaborador obligado de Beijing Chic. Es que estas fotos merecían un post. Y yo solo soy taurina de tardes de sábado delante de la tele con mi abuelo. Vamos lo justito. De hecho en mi universo no existían los toreros, hasta que una compañera de piso (que espero siga leyendo este blog), me dijo que tenía una amiga que su novio era torero. Mi amiga era de Toledo y tenía un tío que organizaba capeas en su finca y la gente iba a ponerse delante de las vaquillas. Yo no me pondría delante de un toro a no ser que me apuntaran con una recortada, y en ese caso incluso contemplaría las opciones de darme en un punto vital que tendría el pistolero...

"Y es que es hermoso sentirse parte de un rito milenario en el que cualquier ademán está medido, en el que cualquier gesto, sonido, acción, forma parte de una cadena de emociones colectivas que vibran en un silencio como un estupor de plata, en un escalofrío que aúna la conciencia de que la belleza es algo breve como un alfiler pequeñito y como él igual de dañino si corre por la sangre y los nervios como florecitas asustadas que ven llegar un peligro."